Hoy te fuiste papá…

Aparte de la evidente tristeza y vacío que me queda en el cuerpo por la certeza de no poder volver conversar contigo, me viene a la mente una sola y recurrente palabra: “Orgullo”. Estoy tan orgulloso de haberte tenido como papá que no me cabe en el alma. Esa palabra me viene con una cantidad de imágenes difícilmente ilustrables con palabras pero que te acompañan como evidencia de buen padre, esposo, profesional, trabajador, AMIGO!; incansable buscador de las verdades y desenmarañador de mentiras. Para mi fuiste la personificación de la rectitud, nobleza, fidelidad, honestidad… Definitivamente le sacaste mucho provecho a tu paso por el mundo y nos dejas con el listón bien alto.

Todos los que te conocieron están de duelo y muy pendientes de mamá y tus hijos. ¡Tú sí que supiste cultivar amistades a pesar de tu tremendo carácter, rabietas y acaloradas discusiones!

He pensado que lo mejor que puedo hacer para honrar tu memoria, aparte de intentar ser tan buena persona como lo fuiste tú, es este blog para difundir lo más posible tus ideas y opiniones. Espero que te guste. Te quiero compai!